Frisa Aerospace se enfrenta constantemente al reto de mejorar su productividad y mantener la calidad en el mecanizado de piezas de alta precisión. Para lograrlo ha realizado importantes inversiones en nuevas tecnologías y máquinas-herramienta robustas, que permiten cortes pesados sin sacrificar la precisión en piezas de tolerancias cerradas.

Ubicada en Monterrey, Nuevo León, Frisa, un referente mundial en la fabricación de anillos rolados para la industria aeroespacial, suministra componentes críticos en aleaciones de níquel y titanio para turbinas de aviación civil y comercial.

Alejandro Montemayor, gerente de ingeniería en Frisa Aerospace, explica que su objetivo es superar a la competencia y llevar la ingeniería al siguiente nivel con tecnología avanzada. Montemayor, con 15 años de experiencia en Frisa, ha sido testigo de la evolución de la empresa, desde sus inicios en un pequeño taller de mecanizado hasta convertirse en un proveedor clave para OEM y proveedores de primer y segundo niveles, como GE, Rolls-Royce y Pratt & Whitney.

Expansión y modernización de instalaciones

Frisa inició su operación en el sector aeroespacial en 2003 y ha experimentado varias expansiones significativas desde entonces. En 2012 amplió su taller de mecanizado e instaló nuevas naves, y en 2017 añadió dos más, con planes futuros para una quinta nave y una nueva planta dedicada al mecanizado. En la nave de mecanizado renovada, Frisa ha implementado 12 máquinas de Shibaura Machine Company, América (antes Toshiba), incluidos 4 TUD 16 y 8 TUD 13, que han mejorado significativamente su precisión y productividad.

Las máquinas TUD 16 de Shibaura, con cambiadores automáticos de pallets, facilitan preparar piezas fuera de la máquina, reducir el tiempo de inactividad y aumentar la eficiencia. Estas máquinas permiten cambios de pallet en 90 segundos y permiten realizar cambios de insertos y herramientas sin detener la producción. Esto es crucial para Frisa, que maneja materiales difíciles como Inconel 718, titanio 6-4 y Waspalloy, con aleaciones termorresistentes, duras y abrasivas.

Mejoramiento de procesos y capacitación del personal

En su búsqueda de mejoras, Frisa ha desarrollado un sistema interno en el que los operadores pueden gestionar sus estándares y números de trabajo, con toda la carga de trabajo preestablecida. Este sistema, junto con la preparación previa de programas CNC y tooling, permite una operación más eficiente y menos tiempo de inactividad.

La capacitación del personal es una prioridad para Frisa. Muchos de sus ingenieros comenzaron como torneros, y al avanzar en la empresa contribuyen al desarrollo de programas CNC y tooling. Frisa también colabora con escuelas técnicas y universidades para entrenar y capacitar a nuevos empleados. El objetivo es crear una escuela formal de capacitación con el fin de asegurar que los operadores estén certificados y bien preparados para trabajar con las máquinas.

Innovación y tecnología para la competitividad

La implementación de dispositivos autocentrables y autoajustables es uno de los próximos objetivos de Frisa para mejorar aún más la eficiencia en el cambio de piezas. Las máquinas Shibaura también están habilitadas para usar palpadores de Renishaw, lo que representa una ventaja competitiva adicional. Alejandro Montemayor enfatiza la importancia de llevar la ingeniería al siguiente nivel, que comienza desde la máquina y las herramientas hasta los periféricos, para lograr mejores capacidades y resultados.

Frisa ha reducido más de 15,000 horas de mecanizado en el último año gracias a mejoras de procesos y tecnología avanzada, lo que equivale a la compra de tres centros de mecanizado. Montemayor, quien destaca la importancia de invertir en tecnología y en la relación con fabricantes de máquinas y herramientas, asegura que cualquier taller puede alcanzar altos niveles de productividad con la estrategia adecuada.

Futuro y crecimiento

La visión de Frisa para los próximos 5 a 10 años es continuar siendo una empresa fuerte y resiliente, capaz de adaptarse a los ciclos económicos y salir renovada de las crisis. Con una integración vertical más profunda y un mayor conocimiento en mecanizado, Frisa aspira a ofrecer soluciones completas a sus clientes, desde la forja hasta componentes totalmente mecanizados.

Montemayor expresa su satisfacción de trabajar en Frisa y de ver crecer a su equipo. La mayoría de los empleados de Frisa han sido formados internamente, y la empresa se enorgullece de su cultura de desarrollo y capacitación. Con planes de crecimiento continuo y mejoras tecnológicas, Frisa está posicionada para mantener su liderazgo en la industria aeroespacial.