De aprendiz a líder: la trayectoria de Marcos Sepúlveda en el sector metalmecánico
Conversamos con Marcos Sepúlveda, director general de Schunk México. Desde sus inicios como un joven curioso en un almacén hasta llegar a liderar una de las empresas más reconocidas en el sector de sistemas de sujeción, Marcos nos comparte su trayectoria y sus perspectivas sobre la evolución de la industria.
Eduardo Tovar: Cuéntanos cómo te iniciaste en este mundo metalmecánico.
Marcos Sepúlveda: Es un dato, la verdad, curioso e interesante. Por azares del destino me mandaron a trabajar a los 13 años. Entré a una compañía que importaba chucks manuales desde España. Eran de la marca MAN, competencia de aquellos TDG. Estos chucks llegaban por barco, las cajas se mojaban y había que desarmarlas y limpiarlas. Así que, a los 13 años, estaba yo en el almacén, y siempre le digo a la gente que el almacén es un punto estratégico de la compañía, es el corazón. Ahí llega toda la mercancía y de ahí sale toda la mercancía. Ahí me di cuenta de quién es el cliente, cuándo compra, qué tanto compra y a qué precio.
El dueño de la compañía llegaba de la Expo IMTS con montones de catálogos, y yo, curioso, los ojeaba y aprendía. Me empapaba de información y pronto me convertí en una especie de experto en el almacén. La curiosidad y el deseo de aprender fueron factores clave en mi desarrollo. A los 15 años, un cliente llamó porque había un problema con un chuck. Me mandaron a mí, un chico de 15 años, a solucionarlo. Cuando llegué el cliente se molestó, pero finalmente me dejó intentarlo. Resultó que el chuck estaba mal instalado. Lo desarmé, lo volví a montar y funcionó perfectamente. Desde entonces, ese cliente me compraba todo lo que yo le vendiera. Eso me llevó a vender y aprender más sobre el producto y el mercado.
E. T.: ¿Cómo fue tu experiencia en ese ambiente a una edad tan temprana?
M. S.: Trabajar desde joven me dio una perspectiva única del sector. No solo aprendí sobre la importancia de los productos y su funcionamiento, sino sobre la logística y el proceso de importación. Recuerdo cómo me emocionaba cada vez que llegaban nuevos productos al almacén. Me gustaba desarmar las cosas, ver cómo funcionaban y a dónde iban. Aprendí sobre la importancia de cada pieza en el proceso de producción y cómo cada componente, por pequeño que fuera, tenía un papel crucial en el funcionamiento de las máquinas.
E. T.: ¿Cómo llegaste a Schunk?
M. S.: Trabajé en diferentes lugares y aprendí sobre importación y ventas. Un día, en una expo en Los Ángeles me encontré con Schunk. Les pregunté si les interesaba vender su producto en México y, después de algunas conversaciones, me ofrecieron el puesto. Inicialmente, fue difícil vender un producto tan avanzado en un mercado que aún no lo necesitaba, pero perseveré y encontré mi primer gran pedido. Desde entonces, he aprendido a vender la tecnología del producto y no su precio. Hoy, después de 24 años, estoy muy agradecido con Schunk por la confianza y las oportunidades que me han dado.
E. T.: ¿En qué evento te contrataron y cuántos años llevas trabajando en Schunk? ¿Eres empírico?
De izquierda a derecha, Marcos Sepúlveda, director
general de Schunk México; y Eduardo Tovar, director editorial de Modern Machine Shop México.
M. S.: Me invitaron a Westec en Los Ángeles en 1998, y en el año 2000 Schunk me contrató. Así que llevo 24 años de trabajar, muy contento, para la familia Schunk. Durante estos 24 años Schunk ha confiado en México y en mí, y estamos por inaugurar una nueva planta. Realmente agradezco estas oportunidades. No soy empírico. Tuve la suerte de que me dieran el empleo a los 13 años mientras estaba en la preparatoria. Me permitieron trabajar y estudiar. Terminé la preparatoria, comencé a estudiar Ingeniería Mecánica y Eléctrica, y luego me cambié a Mecánica Electrónica, que en ese entonces no era Mecatrónica. Esta oportunidad me permitió conocer el producto y el mercado.
E. T.: ¿Cuáles han sido los cambios más significativos que has visto en la industria a lo largo de tu carrera?
M. S.: La transición de equipos manuales a máquinas CNC ha sido monumental. Al principio había mucho miedo y desconocimiento, pero la industria creció con rapidez. La necesidad de nuevas habilidades y la evolución de las máquinas han cambiado la forma en que producimos y diseñamos piezas. La industria automotriz y la aeroespacial han avanzado increíblemente rápido, y la tecnología continúa transformándose.
Cuando comencé, todo era manual: tornos manuales, fresadoras tipo Bridgeport. Luego llegaron los primeros tornos Leadwell CNC y los chucks automáticos. Muchos operadores tenían miedo de usar las nuevas máquinas porque ya no podían meter las manos, y la idea de programar una máquina para que corriera a 10,000 revoluciones cuando estaban acostumbrados a 3,000 o 5,000 era intimidante. Pero una vez superados esos temores, la adopción fue rápida y transformó completamente la industria.
“Aprendí a vender la tecnología del producto y no su precio”, afirma Marcos Sepúlveda. Su perseverancia y conocimiento han sido claves para el crecimiento de Schunk en México.
E. T.: Marcos, te la pasas trabajando, pero ¿tienes hobbies? ¿Qué haces para distraerte?
M. S.: La tecnología y el cine tienen mucho en común con nuestra industria. Ambos campos requieren innovación constante, y me fascina ver cómo se aplican las últimas tecnologías para mejorar el producto final. La música instrumental también me ayuda a relajarme y a concentrarme. Me gusta escuchar diferentes estilos y composiciones mientras trabajo o en mi tiempo libre. Además, disfruto mucho leyendo sobre las últimas tendencias en nuestra industria. Modern Machine Shop, por ejemplo, es una de mis fuentes favoritas. Cada número es como una juguetería para mí, lleno de nuevas herramientas y tecnologías que podrían transformar nuestra manera de trabajar.
E. T.: ¿Qué te motivó a seguir una carrera en este sector y no en otro?
M. S.: La verdad, desde joven siempre fui curioso y me gustaba entender cómo funcionaban las cosas. Al trabajar en el almacén y desarmar chucks, me di cuenta de lo fascinante que era este mundo. El hecho de que algo tan simple como un chuck pudiera tener un impacto tan grande en la eficiencia de una máquina me hizo ver la importancia de cada componente. Además, me encantaba la idea de mejorar y optimizar procesos. La mecánica siempre me ha fascinado, y la posibilidad de trabajar con tecnología avanzada y herramientas de precisión me atrapó desde el principio.
La oportunidad de combinar mi amor por la mecánica con la tecnología fue lo que realmente me atrajo. Además, el hecho de que este sector está en constante evolución significa que siempre hay algo nuevo que aprender. Nunca me aburro porque continuamente hay nuevos desafíos y tecnologías que dominar. Y, por supuesto, la satisfacción de ver cómo nuestras soluciones ayudan a los clientes a mejorar sus procesos y aumentar su productividad es una de las mayores recompensas de esta carrera.
E. T.: ¿Cuáles son algunos de los desafíos que has enfrentado en tu carrera y cómo los has superado?
M. S.: Uno de los mayores desafíos que enfrenté fue la resistencia inicial a la adopción de nuevas tecnologías. Muchos de nuestros clientes estaban acostumbrados a sus métodos tradicionales y no veían la necesidad de cambiar. Tuvimos que educarlos sobre los beneficios de las nuevas tecnologías y demostrar cómo podrían mejorar sus procesos y reducir costos a largo plazo. Fue un procedimiento lento, pero con paciencia y persistencia logramos ganarnos su confianza.
Otro desafío fue la adaptación al rápido ritmo de cambio en la industria. La tecnología avanza a un ritmo vertiginoso, y es crucial mantenerse al día con las últimas tendencias y desarrollos. Para superar esto siempre he priorizado la formación continua, tanto para mí como para mi equipo. Asistimos a conferencias, participamos en cursos de capacitación y siempre buscamos maneras de mejorar nuestras habilidades y conocimientos.
E. T.: ¿Qué consejo les darías a los jóvenes que están considerando una carrera en el sector metalmecánico?
M. S.: Mi consejo principal sería que nunca dejen de aprender. Este es un campo en constante evolución, y aquellos que se mantengan al día con las últimas tecnologías y tendencias serán los que lideren el futuro. También les recomendaría que busquen experiencias prácticas y se involucren en proyectos reales. La teoría es importante, pero la experiencia práctica es invaluable. Trabajar en el campo, resolver problemas y ver cómo se aplican las tecnologías en el mundo real les dará una comprensión más profunda y aplicable de su carrera.
Además, les diría que no tengan miedo de tomar riesgos y probar cosas nuevas. La innovación, a menudo, requiere salir de nuestra zona de confort y experimentar nuevas ideas y enfoques. No siempre es fácil y a veces puede ser frustrante, pero los resultados valen la pena. Por último, pero no menos importante, les recordaría que la pasión y la dedicación son claves. Si realmente aman lo que hacen y están dispuestos a poner el esfuerzo necesario, encontrarán éxito y satisfacción en su carrera.
E. T.: ¿Cuál ha sido tu mayor logro en Schunk hasta ahora?
M. S.: Uno de mis mayores logros ha sido establecer y consolidar la presencia de Schunk en México. Cuando comenzamos había mucho escepticismo sobre la posibilidad de que hubiera un mercado para nuestros productos aquí. Pero con perseverancia y trabajo duro logramos no solo introducir nuestros productos, sino también educar al mercado sobre los beneficios de nuestras tecnologías avanzadas. Ver cómo hemos crecido y cómo nuestros productos han ayudado a tantas empresas a mejorar sus procesos es una de mis mayores satisfacciones.
Otro logro significativo ha sido la apertura de nuestra nueva planta en México. Esto no solo es un testimonio de nuestro éxito y crecimiento en la región, sino también una señal de nuestra confianza en el potencial del mercado mexicano. Estoy muy orgulloso de este logro y de todo el equipo que ha trabajado tan duro para hacerlo posible. Esta planta nos permitirá ofrecer un mejor servicio a nuestros clientes y expandir aún más nuestra presencia en la región.
E. T.: ¿Qué te ves haciendo en los próximos 10 años?
M. S.: En los próximos 10 años espero seguir impulsando la innovación y el crecimiento en Schunk. Me gustaría ver a la compañía expandirse aún más y convertirse en un líder indiscutible en el sector metalmecánico de América Latina. También me gustaría seguir desarrollando y promoviendo a la próxima generación de líderes en la industria. Creo que es importante transmitir el conocimiento y la experiencia a los jóvenes talentos para asegurar el futuro de nuestra industria.
Además, espero seguir aprendiendo y creciendo profesionalmente. La tecnología y la industria permanecen en constante evolución, y quiero asegurarme de que siempre estamos a la vanguardia. Tengo una gran pasión por lo que hago, y no puedo imaginarme haciendo otra cosa. Espero poder seguir contribuyendo al éxito de Schunk y a la industria en general durante muchos años más.
E. T.: ¿Cuál crees que será el futuro de la industria metalmecánica?
M. S.: Creo que el futuro de la industria metalmecánica está en la automatización y la digitalización. La adopción de tecnologías como el IoT, la inteligencia artificial y la fabricación aditiva continuará transformando la manera en que producimos y diseñamos piezas. Estas tecnologías no solo aumentarán la eficiencia y la precisión, sino que permitirán la creación de diseños más complejos y personalizados.
Además, creo que veremos un aumento en la colaboración y la integración de diferentes disciplinas. La línea entre la ingeniería mecánica, la electrónica y la informática se está difuminando, y los profesionales del futuro necesitarán tener conocimientos en múltiples áreas para ser verdaderamente efectivos. La educación y la formación continua serán claves en la preparación para estos cambios.
Finalmente, creo que la sostenibilidad tendrá un papel cada vez más importante en nuestra industria. Los consumidores y las empresas están cada vez más preocupados por el impacto ambiental de sus productos y procesos, y la industria metalmecánica no es una excepción. Veremos un aumento en el uso de materiales sostenibles y procesos de fabricación que minimicen el desperdicio y reduzcan la huella de carbono. Es un desafío emocionante y una oportunidad para que nuestra industria lidere el camino hacia un futuro más sostenible.
Contenido relacionado
Innovaciones en dispositivos de sujeción para máquinas de 5 ejes
Conozca los avances en dispositivos de sujeción adaptados para máquinas de 5 ejes que mejoran la precisión y el flujo de trabajo en tallerres de mecanizado.
Leer MásEn Faurecia, tecnología de sujeción mejora la productividad
Faurecia cambió la tecnología de sujeción que utilizaba y registra impactos inmediatos de productividad en su área de maquinados.
Leer MásCollet chuck vs. chuck de mordazas: la elección correcta
Entienda cómo la elección entre un collet chuck y un chuck de mordazas puede influir en la velocidad, precisión y productividad de sus operaciones de torneado.
Leer MásSchunk fortalece el sector metalmecánico en México con la inauguración de su nuevo centro tecnológico en Querétaro
El 22 de agosto de 2024 fue una fecha clave para el sector metalmecánico en México con la inauguración del nuevo centro tecnológico de Schunk en el Parque Industrial Tecnológico Innovación de Querétaro.
Leer MásLea a continuación
Schunk anuncia proyecto de inversión en Querétaro
Junto con autoridades del gobierno de Querétaro la empresa Schunk anunció un proyecto de inversión por más de 119 millones de pesos.
Leer MásRota NCR-A ofrece agarre seguro y estable para el mecanizado de piezas
El Rota NCR-A, que Schunk presenta en Meximold, brinda precisión y robustez en el agarre durante el mecanizado de piezas.
Leer MásPor qué usar torneado tipo suizo
¿Para qué clase de producción se usan los tornos tipo suizo? ¿En qué se diferencian de los centros de torneado convencionales? Expertos y usuarios cuentan sus experiencias.
Leer Más