Industria de moldes y troqueles: ¿cuáles son los retos de cara al futuro?

En 2019, el Clúster de Herramentales realizó un primer estudio sobre la industria de moldes y troqueles en México, cuyos datos indicaron que la producción nacional tenía un valor de 550 millones de dólares.

En ese mismo año se realizó la primera edición de Meximold en la ciudad de Querétaro, evento que se ha convertido en el punto de encuentro para el sector de moldes en México.

En aquella ocasión, Bob Williamson, presidente de la Internacional Special Tooling and Machining Association (ISTMA) comentó que se encontró con una industria vibrante, altamente tecnificada y competente, que se abría camino en el mundo.

Señaló que la industria mexicana enfrentaba muchos retos, por lo que era necesario crear sinergias entre el sector gobierno y la industria privada con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de las personas y elevar las capacidades de la industria.

Dijo que era importante la escalabilidad de los proveedores para la industria y que se requería de empresas manufactureras grandes y eficientes que brindaran amplios resultados.

“Si México quiere mantener una economía manufacturera sostenible, es vital crear la capacidad de soporte para la industria manufacturera. Hay que reconocer que no existe la manufactura sin herramentales”, comentó Williamson aquel año.

El directivo puntualizó que para tener una economía manufacturera sostenible, se necesitaba una industria de herramentales interna viable y vibrante.

Cinco años después, el Clúster de Herramentales informó que en el más reciente estudio sobre la industria de moldes y troqueles en México, el valor de la producción nacional era ya de 940 millones de dólares, es decir, casi el doble que en 2019.

“Calculamos el valor de la industria en 5,500 millones de dólares. Un millón se produce en México. Y el potencial de crecimiento lo dividimos en dos: 3,000 millones en importaciones de moldes, troqueles, aditamentos, fixtures, es decir, de producto completo. Y otros 1,500 millones son de refacciones y demás”, comentó Alfonso Peña, director del clúster.

Los caminos de la industria de moldes y troqueles

De acuerdo con Alfonso Peña, existen tres grandes caminos para la industria nacional. El primero es tratar de mantenerse en línea con la tecnología, contar con lo más reciente e ir explorando otras tecnologías, como la manufactura aditiva.

El segundo es invertir en diseño/ingeniería, aspecto fundamental que debe ser constante y que a mediano plazo presente frutos.

“El tercer camino es que las empresas se unan a las diferentes asociaciones, clústeres, según el sector en el que estén. Creo que esa apertura y esa colaboración que se da en las asociaciones se puede aprovechar mucho, simplemente viendo las mejores prácticas de la industria, y los clústeres y asociaciones son un buen escaparate para obtener esa información”, indicó Peña.

En el caso del primer aspecto, la tecnología, Antonio Zetina, gerente general de la Asociación Mexicana de Manufactura de Moldes y Troqueles (AMMMT), comentó que los miembros de la asociación están muy interesados en la renovación de sus equipos y en contar con maquinaria que pueda competir en el ámbito global.

“Vemos una competencia muy precisa con muchos mercados a escala internacional, con algunos no precisamente por la calidad, sino por el precio, como lo es con China”, agregó Zetina.

El entrevistado dijo que ante esta situación la industria nacional intenta mejorar su calidad y acoplarse a los costos bajos que pudieran llegar a requerir sectores como el automotriz, donde los estándares de calidad, lejos de bajar aumentan, y son los costos de manufactura los que tienen que bajar.

En el caso del diseño/ingeniería, Juan Benavente, presidente nacional de la AMMMT, dijo que en México, en los diversos sectores, hay empresas que se encargan de hacer todo, desde mantenimiento, fabricación completa y liberación de ingeniería.

“No tanto como en países desarrollados, por ejemplo Japón, donde hay muchas empresas que hacen toda la validación interna. En México aún necesitamos mucha colaboración entre empresas para poder validar un producto al 100 %. Muy pocos tienen la capacidad para hacerlo todo”, indicó Benavente.

Al respecto, Alfonso Peña señala que en el clúster trabajan una ruta de desarrollo de las empresas: “Por ejemplo, para una empresa que hace refacciones tenemos un programa para pase de refacciones a mantenimiento. Y los que están en mantenimiento que pasen a cambios de ingeniería. Y cuando tengan refacciones, mantenimiento, cambios de ingeniería, que empiecen a hacer los primeros moldes o troqueles completos”.

Respecto al tercer camino, el de la vinculación, Antonio Zetina destacó que hoy los organismos empresariales firman convenios de colaboración bajo un formato de necesidad.

“Al final del día esto, sin duda, habla de que tenemos una responsabilidad muy precisa, puesto que conocemos las necesidades que imperan en el mercado global y en el nacional”, indicó.

Explicó que desde la asociación impulsan y llevan a cabo un programa denominado Programa de Proveeduría Grupal.

“Buscamos romper un paradigma muy grande en México por cultura, simplemente, dejamos de ver al que está al lado como un competidor para verlo como un aliado, un proveedor estratégico para poder cumplir con las capacidades que hoy demanda la manufactura en México, principalmente”, explicó Zetina.

Enfatizó que no se trata de un convenio de colaboración sin sentido, sino de alianzas estratégicas y convenios de colaboración con un resultado de vinculación directa.

Capacitación, el otro gran reto para la industria

De acuerdo con Juan Benavente, presidente nacional de la AMMMT, en la industria hace falta personal adecuado.

“En la asociación tenemos un tema muy importante: la capacitación. Lo estamos manejando con entidades privadas y hacemos muchos esfuerzos con universidades, con organismos internacionales que ya tienen estos planes.”

Dijo que la idea es empezar a traerlos a México: “Tenemos una alianza con instituciones de Barcelona y vamos a ofrecer estos planes de capacitación en México, enfocados a nivel de rango medio como diseñadores, es decir, que ya tienen algún expertise previo”.

Agregó que también están implementando estrategias en conjunto con otros organismos, como la AMT, a través de la plataforma Tooling U, que está muy enfocada en capacitaciones a nivel operativo, desde cómo interpretar dibujos hasta el montaje de piezas y set up.

“Pero lo más importante que hemos visto es la educación dual. Los egresados que recibimos en nuestras industrias no tienen el expertise ni el conocimiento, así que nos toma mucho tiempo capacitarlos. La educación dual, ahora, nos ha generado un poco más de eficiencia, por así decirlo”, explicó Benavente.

Detalló que la idea es trabajar en un entorno global, en el sentido de capacitar desde la persona más baja de la cadena hasta la más alta.

“Muchos de los esfuerzos de capacitación los realizan las propias empresas. Tenemos organizaciones que ya disponen de una nave industrial solo para el tema de capacitación, donde anualmente preparan a 80 personas; entonces, ellos mismos se quedan con personal y también alimentan la demanda que existe en su región”, agregó el directivo.

Asimismo, refirió que están revisando los programas académicos de escuelas y de universidades para ver cómo las pueden adecuar con la capacitación que se requiere para que el personal tenga las habilidades.

Por su parte, Antonio Zetina destacó el trabajo de empresas como Evolución en Moldes, Grupo GPA y Precision Group, entre otras, que tienen convenios con instituciones educativas para la formación de talento.

“Por iniciativa propia reciben a estudiantes de ingeniería. Les dan no solo la oportunidad de aprender, sino de operar propiamente las máquinas, con una beca y con la oportunidad de que sigan estudiando, trabajando y aprendiendo”, comentó Zetina.

En este sentido, Alejandro Luna, director general del Centro de Innovación en Moldes y Troqueles del Estado de Chihuahua, dijo que este espacio tiene tres funciones fundamentales: la capacitación, el desarrollo de paquetes tecnológicos y la consultoría a la industria.

“Nuestro objetivo general es el fortalecimiento de competencias de la pequeña y mediana industria a través de la implementación y ejecución de capacitación altamente especializada, así como proveer servicios de manufactura avanzada a la industria de moldes y troqueles, además de coadyuvar al desarrollo de proyectos relacionados con la innovación tecnológica —comentó Luna—, postulados por universidades y empresas, principalmente aquí en la región de Juárez y El Paso, Texas.”

Destacó que en la región muchas empresas buscan soporte a sus procesos: “Si bien hay algunas empresas, no todas trabajan en moldes más complejos para industrias como la automotriz o la aeroespacial”.

“En esta zona hay mucha industria de maquila —las Tiers 1 y 2—, y muchas pymes que les dan servicio. Entonces, las empresas grandes, normalmente, no carecen del recurso humano calificado, porque lo traen de donde lo requieran, pero las empresas pequeñas no tienen esas facilidades.”

Dijo que por ello se concentran en la pequeña y en la mediana industria, para darles proveeduría a las grandes empresas.

Comentó que el centro empezó a operar con tres equipos de la marca Makino, una erosionadora de penetración, una erosionadora de hilo y un centro de maquinado vertical, ubicados dentro de las instalaciones de la empresa Solution Tools.

“En la región hay una condición muy particular: las personas se mueven con rapidez de un puesto de trabajo a otro. Hay mucha rotación. Entonces, con la consultoría tenemos dos programas: uno llamado Plan de vida y carrera, y otro de Formación de instructores”, indicó Luna.

En el caso del primero, agregó Luna, los tres principales propósitos son la captación de nuevo talento, incrementar la permanencia de las personas dentro de la empresa y crear un esquema de rotación.

“Mediante el programa Plan de vida y carrera ingresamos nuevas personas y las tenemos listas para cuando la otra persona se mueva de posición, y fomentamos que la persona se quede dentro de la empresa la mayor cantidad de tiempo posible”, puntualizó Luna.

En el caso del segundo programa, a las personas con más tiempo en la empresa les dan una formación como capacitadores o facilitadores, para que cuando llegue el nuevo talento, ellos los arropen y empiecen a compartir todo el conocimiento que han adquirido a lo largo de los años.

Otros aspectos que la industria debe considerar

Antonio Zetina señaló que el financiamiento es un eje fundamental para que las empresas de la industria y, en general, de toda la cadena de suministro, puedan tener la oportunidad de invertir.

“Si bien hoy todos los empresarios tenemos acceso a la banca comercial, creo que sería clave que hubiera un programa de apoyo por parte del gobierno mediante un financiamiento con programas estructurados, accesibles, con alguna tasa preferencial que puedan pactar con alguna banca comercial o, incluso, que sea de manera directa”, detalló Zetina.

Al respecto, Juan Benavente enfatizó que aunque hay capacidad en México, faltan créditos adecuados y que las instituciones de gobierno brinden financiamiento a precios competitivos, como ocurre en el ámbito internacional.

Finalmente, Antonio Zetina comentó que de cara al futuro, las empresas deben seguir pensando en el nearshoring.

“No solo es una palabra rimbombante. Creo que si vemos estadísticas, principalmente de la manufactura multisectorial, comprobamos que hemos avanzado en el tema de las exportaciones e importaciones”, indicó.

A su vez, Juan Benavente puso énfasis en sectores como la industria médica y la de electrodomésticos: “Hay empresas que tienen la capacidad de fabricar moldes para la industria médica con mucha precisión, pero a lo mejor les falta quienes hagan el diseño. Entonces, como asociación, tenemos los convenios con instituciones que pueden dar ese servicio. Ya no dejamos pasar proyectos sin cotizar, ya les podemos ofrecer desde el diseño hasta la entrega final validada”.