“No solo es permanecer, sino salir fortalecidos”: Arturo Monroy

Eduardo Tovar: ¿qué significa para Iscar celebrar treinta años en México?

Arturo Monroy: Es un aniversario importante. Cronológicamente, podemos decir que son seis lustros, tres décadas o dos quindenios, pero es algo mucho más importante. Fundamentalmente, significa permanencia, crecimiento, confianza y estrategia con visión de futuro.

Por decirlo de una forma coloquial: hemos pasado la prueba del tiempo. Esto significa que hemos sido capaces de permanecer de manera creciente en un mercado altamente competitivo, reaccionar de manera rápida a los cambios en los sistemas de producción, comercialización, logística, y de procesar con agilidad estos cambios de entorno para no solo permanecer, sino salir fortalecidos.  

Nuestra principal fortaleza es nuestra principal estrategia, y esta es la innovación tecnológica, en constante desarrollo. Esto nos permite siempre estar a la vanguardia, con productos que se adaptan perfectamente a las necesidades de productividad, rentabilidad y rendimiento de los clientes.

ET: ¿cuáles han sido los principales cambios del sector metalmecánico mexicano en estas tres décadas?

Los principales cambios se ubican en el marco del primer Acuerdo de Integración Comercial de los tres países de la región: Canadá, Estados Unidos y México, con el TLCAN (NAFTA-1), en el año de 1992, y el nuevo T-MEC (NAFTA-2), firmado en 2018 y ratificado en un nuevo protocolo en 2019, que mucho tienen que ver con los cambios estructurales en la producción y la manufactura. Una especie de reconversión industrial profunda, en la que la prioridad fue y sigue siendo poder suministrar a bajo costo y alta calidad partes, insumos y componentes para el mercado integrado.

El cambio más importante se da en el terreno de la tecnología, reflejado en los segmentos automotriz y aeroespacial con la adopción casi masiva de maquinaria y equipo CNC, que reducen drásticamente los tiempos de producción y minimizan los errores humanos. De hecho, México hoy ocupa el sexto lugar en el mercado de máquinas-herramienta, y también se da en la adopción de software de manufactura para la producción de formas tecnológicamente complejas, además de los segmentos de moldes y troqueles, médico y electrónico.

En general, presenciamos el uso cada vez más frecuente de medios y herramientas digitales en los procesos de manufactura.

ET: ¿qué industrias han sido las más importantes para el desarrollo de la manufactura mexicana en estos treinta años?

AM: la industria automotriz, sin duda. No solo a nivel de OEM, sino también en la manufactura de autopartes. Recordemos que México se ubica hoy como el cuarto exportador mundial y primero hacia Estados Unidos. Aquí la digitalización de los procesos es una realidad, la Industria 4.0 y la inteligencia artificial encuentran su nicho natural. Asimismo, la industria aeroespacial ha desempeñado un papel preponderante en este desarrollo, dado que alrededor del 50 % de la FDI se concentra en este sector. Imaginemos tan solo la tecnología requerida para fabricar partes y componentes complejos, como fuselajes, turbinas, trenes de aterrizaje, entre muchos otros. También la industria de M&D ha sido muy importante en la reconfiguración tecnológica de nuestra manufactura.

Considero que varios segmentos industriales tienen mucha perspectiva de crecimiento consistente. Uno de ellos, definitivamente, es el segmento automotriz, en el que México ocupa el séptimo lugar en producción de vehículos. Si tomamos en cuenta toda la cadena de suministro, y todos los productores autopartistas, ese lugar puede crecer.

En el segmento de autopartes tenemos todos los componentes del tren motriz de un automóvil producidos en México, desde el chasis hasta los sistemas de transmisión, de frenado, de dirección, todo se produce en México. Es un segmento dinámico, con paso firme y consistente, y que va a crecer en los próximos años.

Si bien en el sector aeroespacial no tenemos presencia de OEM, excepto Bombardier, sí tenemos producción prácticamente de todo el sistema motriz y de aterrizaje del avión. Para ello se han organizado clústeres en diferentes entidades, como Sonora, Chihuahua, Querétaro, Zacatecas. Estoy optimista y seguro de que este segmento, en unos años, también va a tener un paso firme y consistente de crecimiento.

ET: si algo distingue la cultura de Iscar, ¿cómo podría explicarla?

La cultura de la innovación permanente, y de ser los primeros en el mercado. Partimos fundamentalmente de una filosofía organizacional que le da bases a la empresa. Nuestra visión es ser proveedores número uno, y ser líderes en el mercado por medio de un servicio completo y personal altamente calificado, y a través de un producto innovador. Si tenemos esas bases bien fundamentadas, definitivamente, nuestro proyecto es implantar la marca en el país, como también lo hacen las filiales de Iscar en el ámbito mundial.

Hoy por hoy creemos ser una marca líder, pero tenemos que seguir consolidando nuestra posición. Primeramente, a través de nuestra filosofía institucional bien arraigada, y después de ello debemos tener también una estructura organizacional muy fuerte, que pasa por un staff técnico altamente especializado, un equipo de ventas con visión y ansia de crecimiento, y una estructura logística y financiera que responda a esta concepción integral de la compañía.

Iscar invierte el 5 % de sus ingresos en investigación y desarrollo. Los ingenieros de Iscar en el mundo, donde hay centros de I&D, se dedican a diseñar, rediseñar y reinventar continuamente. Y eso ha sido símbolo de la cultura que Iscar ha traído al mercado mexicano. Con el tiempo, nuestra estructura no solo se agrandó, sino que se fue sofisticando. ¿Qué significa? Que para tener una presencia sólida en el mercado necesitábamos poner cimientos y fundamentos robustos. Y eso ha hecho Iscar a lo largo de estos treinta años.